martes, 10 de noviembre de 2015

EL AGUA DE LA VIDA


 Pesca ligera, con los sandeel slug 10 y las sandeel jig head 7 gr, con la caña LRF 2 - 10 gr.

Impresionantes estampas nos ha dejado el mar durante esta última semana. Hacía mucho tiempo que no había tanta actividad por parte de los peces depredadores, años diría yo. ¿Qué ha cambiado para que el desierto se convierta en vergel? Simplemente, el aporte de agua dulce. Una gran riada ha estado bajando por el Turia bastantes días, más el desagüe de una Albufera a rebosar.  Más de un grado menos en el agua y fitoplancton que ha atraído a enormes bancos de boquerones, y con ellos a hordas de bacoretas. 

Bancos de bacoretas por doquier... impresionante.

Pajareras por todas partes, para todo el mundo, una cantidad inusual de peces activos, aunque llama poderosamente la atención la relativa falta de los predadores clásicos de estas situaciones que dominaban antaño, tales como jurelas, palometones o anjovas... claro síntoma de enfermedad cuando las especies más sedentarias son las que menos actividad muestran... pues prácticamente no están, siendo los peces más migratorios y estacionales los que han salvado esta campaña, con atunes, llampugas, bonitos y bacoretas. Sirva este hecho para hacernos recapacitar sobre qué estamos haciendo mal y sobre la terrible necesidad de que llegue agua dulce al mar. 
Anjovas, no demasiadas y en tallas contenidas, claro indicio de sobre pesca.